La Revisión Global de Relaves, convocada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), los Principios para la Inversión Responsable (PRI) y el Consejo Internacional de Minería y Metales (ICMM), lanzó el Estándar Global de Gestión de Relaves para la Industria Minera. El estándar fue desarrollado por un panel de expertos multidisciplinario, con aportaciones de un grupo asesor de múltiples partes interesadas. El Estándar se basa además en las mejores prácticas vigentes y los hallazgos de fallas que han tenido lugar en el pasado en las instalaciones de relaves.
Del 15 de noviembre al 31 de diciembre de 2019, el Estándar se sometió a un período de consulta y comentarios públicos. El equipo de la Revisión Global de Relaves llevó a cabo un total de 21 talleres con una amplia gama de grupos de partes interesadas en Australia, Chile, China, Ghana, Kazajstán y Sudáfrica. La consulta recibió 202 respuestas en línea y por correo electrónico y otras 427 de los participantes en los talleres que tuvieron lugar en los distintos países.
El Estándar Global de Gestión de Relaves para la Industria Minera, que es el resultado del proceso de Revisión Global de Relaves, es un hito importante hacia la ambición de que las instalaciones de relaves generen cero daños para las personas y el medio ambiente.
Respaldado por un enfoque integrado para la gestión de relaves, el Estándar tiene como objetivo prevenir fallas catastróficas y mejorar la seguridad de las instalaciones de relaves mineros en todo el mundo. Su nivel de ambición es mucho mayor que el de las directrices vigentes, al abordar temas cruciales como los siguientes:
- Participación significativa de las personas afectadas por el proyecto durante todo el ciclo de vida de la instalación de relaves mineros.
- Aumento de los requisitos relacionados con los derechos humanos.
- Fortalecimiento de los requisitos de protección ambiental, incluida una mayor atención a los efectos cambiantes del cambio climático en las instalaciones de relaves mineros y la restauración.
- Aplicación de un enfoque estructurado y sólido para la clasificación de riesgos de las instalaciones ya en funciones y aquellas por construirse.
- Establecimiento de un mecanismo de gobernanza para la gestión de las instalaciones de relaves, así como la identificación de la responsabilidad de alto nivel para la implementación del Estándar, en comunicación directa con la Junta.
- Divulgación pública y transparencia de la información sobre las instalaciones de relaves mineros a las partes interesadas.
El Estándar, que se compone de seis áreas temáticas, 15 principios y 77 requisitos auditables, estará respaldado en última instancia por protocolos de implementación que proporcionarán una guía detallada para la certificación o garantía, según corresponda, y para la equivalencia con otros estándares.
